ENERGÍAS RENOVABLES COMO FACTOR DE DESARROLLO
Brigith Tatiana Guzmán Bolaños
La creciente amenaza medio ambiental en relaciòn con el cambio climático es una de las principales preocupaciones a nivel mundial, la dependencia de energía que yace a partir de los combustibles fósiles cada vez es menos rentable y el agotamiento gradual de estas fuentes tradicionales de energía ha despertado una particular persecución hacia nuevas fuentes de energía, más específicamente las conocidad energías limpias o renovables: energía solar, energía eólica, energía hidráulica, energía geotérmica, energía de biomasa.. etc, si bien estas alternativas ampliamente bien conocidas han sido consideradas a lo largo de los años ya que son las más amigables con el planeta es ahora el momento en el que están siendo ampliamente exploradas y consideradas como la mejor opción, según un estudio realizado por Global Carbon Project a nivel mundial cerca de 34.000 millones de toneladas de CO2 fueron emitidas en el año 2020 siendo China el mayor emisor con 10667,8875 millones de toneladas. Colombia con 89,109 millones de toneladas de CO2 preocupa a la hora de analizar la situación que se a nivel interno ya que aunque las cifras no son preocupantes comparadas con las de China y Estados Unidos, se vive una problemática que afecta a la población y directamente a los recursos naturales característicos de este país.
El uso de estas fuentes de energía tradicionales ha traído grandes consecuencias en algunos territorios del país a nivel social, económico y por supuesto como es bien sabido las consecuencias medioambientales nunca terminan de ser calculadas
En el desarrollo de este ensayo se tendrán en cuenta interrogantes cómo ¿Las fuentes de energía renovables apuestan al desarrollo económico?¿Existen consecuencias más allá de una energía limpia?¿Cuáles son las energías más aptas para este país?¿Qué consecuencias ha traído la implementación de fuentes de energía tradicionales al país?, finalmente se presentan las conclusiones que se han obtenido a lo largo del análisis de este tema.
Colombia como potencia energética.
En Colombia la principal fuente de energía es la hidroelectricidad debido a la riqueza hídrica con que cuenta el territorio; en un segundo plano se encuentra la energía proveniente de combustibles fósiles (Carbón, petróleo y gas), sin embargo Colombia siendo tan biodiverso tiene el potencial para explorar nuevas fuentes de energìa y aplicar nuevas alternativas que aporten a la solución de la crisis energética mundial y de igual forma contribuir a la protección del medio ambiente, gracias a su característica ubicación geográfica Colombia cuenta con una radiación solar constante durante todo el año, en especial en zonas como La Guajira, Valle del cauca, Atlántico y Antioquia. Según Ramón Monrás presidente de ABB presidente para Latinoamérica, este elemento es clave para que Colombia se convierta en un valioso generador de energía solar. ‘’El efecto de la energía solar dura hasta 12 horas al día, registrando incluso los índices más altos a nivel mundial. Esto le permite al país generar soluciones solares y granjas solares que generen energía todo el año, con una mayor eficiencia que los países que tienen estaciones’’, señala.
Por otra parte en Colombia Santander, Los Llanos orientales y la costa Atlántica, son puntos claves para la producción de energía a partir de la Biomasa(energía que se genera a partir de cualquier material orgánico proveniente de cualquier ser vivo, sus excretas y sus restos no vivos), datos revelan que el bagazo de caña puede llegar a generar 1.5 millones de toneladas y la cascarilla de arroz cerca de 450 mil toneladas al año.
La producción de electricidad a partir de la energía eólica también puede ser un gran atractivo, actualmente el parque Jepirachi, en La Guajira aporta en 0,1% de la producción de energía nacional y continua siendo ésta el área más prometedora para este tipo de energía ya que debido a su ubicación se ve expuesta a vientos constantes con velocidades que pueden estar entre los 5 y 11 m/s, con capacidad de producir 20 GW, sin embargo zonas como Las Islas de San Andrés, Santa Catalina y Providencia encierran un gran potencial en sus territorios debido a su ubicación.
La energía geotérmica utiliza el calor del subsuelo para generar electricidad, esto mediante perforaciones muy profundas que ayudan a usar la fuerza calorífica y convertirla en electricidad. Colombia ya ha hecho una apuesta por este tipo de energía, en Campo Maracas (Casanare) la empresa Parex, en conjunto con la Universidad Nacional de Colombia inauguraron a mediados del 2021 la primera central geotérmica del país está se estima que producirá 72.000 kilovatios-hora(kWh) por mes lo que se espera que cumpla con un abastecimiento para 480 familias.
De igual forma del otro lado de la balanza la exportación de carbón y petróleo siempre han sido proyectos de gran demanda, según la Agencia Nacional de Hidrocarburos solo en 2011 se obtuvieron $51.303.077.160 en regalías por exportación petrolera, lo que claramente traduce un cuantioso beneficio económico para el país, además en el mismo año se invirtieron 25.570.130 hectáreas para exploración y 2.090.941 en producción, lo que genera empleo y le aporta divisas al país, sin embargo, dejando de lado los beneficios económicos que trae consigo esta actividad, en temas medioambientales la problemática es muy grave, la afectación de los ecosistemas, las consecuencias que trae a los habitantes de la zonas en términos de seguridad alimentaria y las repercusiones sobre las fuentes hídricas: el uso de explosivos durante la exploración puede desviar el cauce de los ríos, desaparecer nacederos, además durante la producción se generan desechos, contaminación con gases y sin hablar de la deforestación ,a cual muchas veces se realiza en áreas donde se encuentran reservas naturales importantes para la conservación de ecosistemas e incluso comunidades quienes tienen que soportar las consecuencias de las explotaciones de sus territorios.
Un ejemplo de la problemática de este tipo de actividades es pueblo Wayuu y las comunidades de la Guajira, quienes llevan años cargando con cargas ambientales desproporcionadas y denunciando que la sequía, las pésimas condiciones en las que viven y los problemas de salud son debido a El Cerrejón, una de las mayores minas de carbón a cielo abierto del mundo, la cual, entro otras cosas ni siquiera es propiedad del estado actualmente, según cifras oficiales de la empresa propietaria, BHP Billinton, Anglo American y Xtrata, esta tiene una capacidad extractiva de 30 a 32 millones de toneladas de carbón anual: Esto en aproximadamente 30 años de funcionamiento ha significado 500 millones de toneladas de carbón, lo cual equivale al 40,5% de las exportaciones colombianas. Y aunque esto debería traducirse económicamente en agua, luz, comida, educación, salud, vivienda, bienestar social, trabajo y carreteras para estas comunidades dueñas del territorio, desafortunadamente no es así, según cifras del DANE, hasta 2013, 123.200 niños murieron de desnutrición, el agua potable en estas comunidades es escasa, no hay alcantarillados, no hay acueductos, las condiciones de salud y educación son precarias, el desplazamiento por consecuencia de la explotación minera es cada vez más frecuente y aunque La Guajira esté bañada por mar y ríos la sed es un conocido de hace mucho tiempo.
No obstante como hemos visto, más allá de los efectos medioambientales, y de los múltiples beneficios que promete esta nueva era llena de nuevas ideas que pueden o no traer consigo buenos resultados, el conflicto que se vive al interior del país como consecuencia de la práctica e implementación de estos nuevos proyectos es mucho más complejo, más allá de una promesa de un camino hacia el desarrollo una realidad completamente diferente existe detrás de esta, consecuencias medioambientales, afectación a los ecosistemas, repercusiones en el desarrollo de las comunidades, el abandono total de las entidades gubernamentales hacia determinados territorios después de lograr sus cometidos, engaño, soborno y precarias condiciones son algunas de los tantos efectos que dejan estas llamadas nuevas tecnologías llenas de perversas ambiciones.
Claro que no se desconoce lo bueno y las buenas intenciones que algunas instituciones desean implementar con eficacia, está claro que no todas son malas y que no todas tienen deseos corruptos, lo ideal sería trabajar en la implementación de estas bajo condiciones tecnológicas, protocolarias,y de seguridad y garantías para disminuir su impacto ecológico y social.
Referencias
-Juliana Cañaveral-Jueves, 10 Julio , 2014 - Explotación petrolera vs medio ambiente ¿Cómo lograr el equilibrio?- Radio Nacional de Colombia
-El cerrejón si es el problema de La Guajira https://colombiaplural.com/cerrejon-problema-la-guajira/
-Energías Renovables- https://www.metropol.gov.co/ambiental/Paginas/consumo-sostenible/Energias-Renovables.aspx
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