ACERCA DE LA NECESIDAD DE ADOPTAR EL NUEVO PARADIGMA EN EL ANÁLISIS ECONÓMICO

 Jennifer Uni Chilito.

Capra en la Trama de la vida, señala una realidad que ya conocemos, y es la necesidad urgente de un cambio de percepción y pensamiento capaz de garantizar nuestra supervivencia, y que esto aún no ha alcanzado a los grandes dirigentes, lideres, profesores de grandes universidades. Capra señala que ello radica en que son incapaces de percibir la interconexión de los distintos problemas y no reconocen hasta qué instancia sus soluciones comprometen el futuro de generaciones venideras.
Es por ello que el concepto de sostenibilidad es clave como citó Capra de Lester Brown: “Una sociedad sostenible es aquella capaz de satisfacer sus necesidades sin disminuir las oportunidades de generaciones futuras”.  (Capra, 1998: 26)  Esto quiere decir que el desafío es poder satisfacer nuestras necesidades y metas sin comprometer el futuro de las futuras generaciones.
Para reconocer que se necesita un cambio de percepción, se debe saber que conlleva en sí un cambio de paradigma pues se trata de la forma como concebimos la realidad. Capra cita el paradigma entendido por Khun como: “una constelación de logros -conceptos, valores, técnicas, etc.- compartidos por una comunidad científica y usados por ésta para definir problemas y soluciones legítimos” (Capra, 1998: 27)
Esto nos debe llevar pensar que aunque en un principio el uso del paradigma viejo (esto es la adaptación del modelo mecanicista de Descartes y Newton), llevó a grandes avances en la economía e incluso consolidarla como una profesión y disciplina científica social, con la revolución marginalista, el hecho de persistir en seguir investigando y tratando los hechos económicos y sociales aisladamente, modelando y simplificando a la sumo sobre supuestos de equilibrio, racionalidad y asimetría de información, entre otros, nos ha llevado a una visión distorsionada de la realidad.
Si vemos la historia de lo que hemos provocado tal vez implícitamente o explícitamente los economistas, podemos convencernos o en menor instancia por lo menos incomodarnos, de la necesidad que tiene la sociedad de economistas con otra percepción, dotados de un nuevo paradigma para hallar mejores y verdaderas soluciones ante los hechos económicos contemporáneos. Un paso rápido es recordando las no acertadas predicciones o la incapacidad de ver venir crisis, en primera instancia, la gran depresión de 1929 en Estados Unidos la cual no se predijo, y en su momento la disciplina no tuvo cómo responder ante el hecho; otra caso para recordar es cuando Irvine Fisher dijo que los precios se mantendrían permanentes, pues habían alcanzado una meta alta, luego ocurre el más devastador desplome del mercado bursátil en EE-UU: Wall-Street, durante el cual el  llegó a perder casi el 90% de su valor.
Una vez recordados estos hechos, y viendo a economistas inmersos en ellos, es interesante saber de qué se trata este nuevo paradigma. 
1.índice Dow Jones: Es el índice más antiguo usado a nivel mundial para reflejar un valor promedio de acciones de compañías públicas en un mercado de valores. El Dow es una medida del pulso de la economía estadounidense.
Para hallar los beneficios de este paradigma, en primera instancia lo analizamos como paradigma social, ya que nuestra disciplina es social, ante esto tenemos la definición de Capra:”una constelación de conceptos, valores, percepciones y prácticas compartidos por una comunidad, que conforman una particular visión de la realidad que, a su vez, es la base del modo en que dicha comunidad se organiza”. (Capra, 1998: 27)
El nuevo paradigma tiene que ver con una visión holística del mundo, que lo ve como un todo y no como una colección de partes, otro concepto asociado a este es el “ecológico” su distinción  permite comprender que en los sistemas vivos las conexiones con el entornos, son vitales. Ya que por ejemplo una visión holística nos permite ver el sistema productivo y sus componentes y la interdependencia de sus partes, pero una visión ecológica nos daría la percepción de ver cómo se inserta en el entorno natural y social: cómo las operaciones de producción a afectan el entorno natural y la comunidad ( contaminación, distribución del ingreso).
El sentido del término ecológico aquí, tiene que ver con lo  que plantea Capra, que  está asociado con la ecología profunda, la cual no separa a los humanos a ninguna otra cosa de su entorno natural, no ve el mundo como una conexión de objetos aislados sino como una red de fenómenos interconectados e interdependientes, esto en nuestra disciplina tiene que ver con la necesidad de atrevernos a estudiar la economía ya no aisladamente como lo hemos aprendido sino a ayudarnos de otras disciplinas, y de tener nuevos valores y una nueva  ética,  para así poder hacer uso de este Paradigma ecológico emergente, como nos lo ha propuesto Capra. Esto es que como economistas a través de los modelos de desarrollo como: el desarrollo concebido como crecimiento, hemos enfatizado en las tendencias asertivas a costa de las integrativas, es decir, expansión a costa de deforestación y no conservación, es respecto que debe haber un cambio de valores.
En relación a ello y para finalizar lo que para mí es una dura confrontación con nuestra manera de concebir la profesión y su ejercicio, algo para analizar es cómo hace muchos años nos dijeron que el camino que debían seguir las economías era buscar el desarrollo, tal como los “ países desarrollados”; nos han planteado el desarrollo de muchas formas: como evolución( el desarrollo es algo al que todos los países llegarán como un proceso de mutación gradual); Como industrialización para generar cambios estructurales en el sistema, etc.  Ahora el mundo se mueve a altos niveles de deforestación ambiental para seguir la idea de industrialización y no solo ello, algunos países tienen deudas adquirieron deudas insostenibles para alcanzarlo. Conseguir el desarrollo se volvió un discurso avalado por economistas, que hasta hoy persiste, pero si vamos a los datos y la realidad vemos que no todos lo han logrado, todos no han logrado escapar de la pobreza y muerte como lo planteó Angus Deaton, a pesar que él halló que las condiciones han mejorado en general para todos los países, también halló que ha incrementado la desigualdad pues el progreso de unos ha llevado a más desigualdad en otros, estos hallazgos de Deaton nos debería llevar a cuestionarnos porqué los modelos que los economistas sugieren y ayudan a consolidar, no están dando los resultados esperados, cómo podemos realmente aportar teorías y modelos a la sociedad que en el largo plazo favorezcan a todos y no solo a algunos, y  hacernos reflexionar sobre la necesidad de un cambio de valores y ética, como por ejemplo, dejar de enfatizar en lo que los economistas han permitido:  tendencias asertivas a costa de las integrativas, en este caso, busca de desarrollo pero a costa de qué, ¿mayor desigualdad para las economías subdesarrolladas?
Bibliografía:
Capra, F., & Sempau, D. (1998). La trama de la vida. Barcelona: Anagrama. P 25-37
Deaton, A. (2015). El gran escape: salud, riqueza y los orígenes de la desigualdad. Fondo De Cultura Economica. Capítulo 1.





Comentarios

Partiendo de la necesidad del concepto de sostenibilidad en donde se hace referencia a la satisfacción de necesidades sin repercutir en las generaciones futuras, resulta acertado repensar la economía desde una visión tanto ambiental como en el cuestionamiento de la lógica del mercado ya que parte de este es el causante de tratar a los recursos naturales como infinitos cuando estos realmente son finitos. La Economía necesita de un sin número de reformas, por lo que los nuevos paradigmas generan expectativas frente hacia dónde se piensa guiar la economía.

Entradas más populares de este blog

¿En qué se respalda el peso colombiano?

La Desmasificación de los Medios de Masas

Economía indígena de tierradentro