¿En qué se respalda el peso colombiano?

¿En qué se respalda el peso colombiano?

El peso colombiano, como se planteó en un anterior texto, es relativamente reciente y se designó como la moneda oficial del país en 1821. Ha sufrido distintas transiciones en diferentes aspectos, desde su emisión y distribución hasta la asignación de su valor, es decir, por aquello que la respalda. Por tanto, para entender qué es lo que le otorga el valor a los billetes y monedas que circulan por el territorio nacional, es necesario recorrer sutilmente cuál ha sido el proceso del respaldo del peso.

Como ya se mencionó, en 1821 se declara al peso como moneda nacional reemplazando al real, sin embargo, en ese momento el Estado no contaba con la capacidad de emitir una moneda para todo el territorio nacional y permite a los bancos emitir su propia moneda hasta que en 1880 se crea el Banco Central, entidad destinada a la elaboración de billetes y monedas. Sin embargo, la medida de desplazar a las monedas emitidas por los bancos se materializa con la adopción del patrón oro (es decir, se empieza a respaldar el dinero en circulación con oro almacenado) en 1871, además, se liga el peso al franco francés con una tasa de cambio equivalente a 1 peso por cada 5 francos. (Exchange, s.f.) Cabe mencionar que lo que hoy conocemos como Banco de la República, tiene su origen en 1923 y fue el resultado de una petición del entonces presidente Pedro Nel Ospina a un grupo de expertos economistas estadounidenses, de encontrar soluciones a la crisis económica por la que atravesaba el país debido a causas asociadas a la Primera Guerra Mundial (Bolaños, 2016).

Posteriormente, en 1931 el Reino Unido decide abandonar el sistema del patrón oro, medida que también adopta Colombia y se vincula al dólar con una tasa de cambio de 1,05 pesos equivalente a 1 dólar. La decisión de tomar al dólar para vincularse, no es coincidencia, pues se podía prever la relevancia que adoptaría esta moneda en la posteridad y que en efecto sucedió después del acuerdo de Bretton Woods, en el que, como en anteriores textos se ha mencionado, terminó posicionando al dólar como la moneda más importante del mundo y principal para realizar transacciones en el mundo.  Por tanto, al abandonar el patrón oro, los colombianos ya no podían cambiar sus billetes por oro, pero la inscripción en los billetes “pesos oro” permaneció en estos hasta el año 1992, cuando un entonces senador, impuso una demanda al Banco de la República por no cambiar un billete por oro y, aunque el senador perdió la demanda, se llevó a cabo el cambio de billetes retirando la inscripción “el Banco de la República pagará al portador la suma de… pesos oro.” (Tiempo, 1994).

Hasta el momento, son claros los sistemas que adoptó Colombia para respaldar su moneda, desde el patrón oro hasta vincularse con monedas fuertes extranjeras. Pero, al momento de encontrar información acerca del actual respaldo del peso colombiano, se torna técnica y compleja de abstraer. En un artículo del portal las 2 orillas, plantea que el peso es una moneda crediticia. Como se sabe, Colombia abandonó el patrón oro en 1931, lo que significa que el oro, ya no sería el respaldo de la moneda nacional, lo que genera la pregunta ¿cuál era entonces el respaldo del dinero que circulaba por el territorio colombiano? Según el mencionado portal, el peso es una moneda crediticia, pues Colombia envió sus reservas de oro a bancos de Estados Unidos y Europa, como garantía de pago de su deuda externa. (orillas, 2016)

Esta postura puede llegar a tener sentido, pero se puede complementar con el concepto de dinero fiduciario que, según el libro El dinero: la teoría, la política y las instituciones “en esto se basa el carácter fiduciario de un sistema monetario, es decir, en la confianza o consenso general de una sociedad en cuanto al dinero no convertible, pero que todos aceptan porque nadie cuestiona su capacidad para adquirir todo tipo de bienes.” (Soto, 2001) Por tanto, si se tienen las reservas de oro comprometidas como garantía de pago de la deuda externa, lo que termina otorgando el valor al dinero es el consenso de que los billetes y monedas que manejamos, tienen la capacidad de adquirir bienes y servicios. Entonces, el debate está servido y, aunque en definitiva entender lo que respalda una moneda se convierte en un tema complejo y técnico, vale la pena preguntarse qué hace que podamos cambiar los billetes y monedas que utilizamos todos los días, por productos y servicios que necesitamos en nuestra vida cotidiana.

Referencias bibliográficas:

Bolaños, É. (12 de marzo de 2016). Del peso del oro al peso de papel. El Espectador. Recuperado el 03 de junio de 2019, de https://www.elespectador.com/noticias/economia/del-peso-del-oro-al-peso-de-papel-articulo-621851

Exchange, G. (s.f.). Global Exchange. Recuperado el 16 de junio de 2019, de El peso colombiano: https://www.globalexchange.es/monedas-del-mundo/peso-colombiano

orillas, L. 2. (05 de abril de 2016). Las 2 orillas. Recuperado el 17 de junio de 2019, de Ya no hay oro en el Banco de la República: https://www.las2orillas.co/ya-no-hay-oro-en-el-banco-de-la-republica/

Soto, O. L. (2001). El dinero: la teoría, la política y las instituciones. Ciudad de México: Universidad Nacional Autónoma de México. Recuperado el 20 de mayo de 2019, de https://books.google.com.co/books?id=3jEFjaHPM8MC&printsec=copyright&redir_esc=y#v=onepage&q&f=false

Tiempo, E. (04 de diciembre de 1994). En busca de los pesos oro. El Tiempo. Recuperado el 17 de junio de 2019, de https://www.eltiempo.com/archivo/documento/MAM-259183