La Desmasificación de los Medios de Masas

En la actualidad, la tercera ola está alterando drásticamente toda la imaginería centralmente producida, inyectada por los medios de comunicación en la “mente de la masa”, y que ayudó  a lograr la uniformización de Comportamiento requerida por el sistema industrial de producción.

Ahora bien, qué es la desmasificación; La desmasificación es el fenómeno contrario a la masificación. Hay masificación cuando un gran número de elementos de un determinado tipo se concentran en un espacio reducido. La desmasificación se consigue de dos modos: disminuyendo el número de dichos elementos o aumentando el espacio que los contiene. Los medios de comunicación forman parte de nuestra vida cotidiana. Los mismos han hecho posible la intercomunicación entre diferentes pueblos y culturas. Esto ha aumentado las posibilidades de diálogo y entendimiento en el mundo, al igual que modos de vida propios de la sociedad de consumo.

A lo largo de la Era de la segunda ola, los medios de comunicación de masas se hicieron cada vez más poderosos. En la actualidad se está produciendo un cammedida que avanza la tercera ola, los medios de comunicación, están siendo derrotados en muchos frentes a la vez por lo que llama el mismo Toffler los “medios de comunicación desmasificados”. La desmasificación de los medios de comunicación tiene su auge en el momento en que surgen nuevas tecnologías, donde aparece el internet, así, se promueve el individualismo de la comunicación, debido a que cada vez más, cada usuario de internet puede adquirir de manera más eficiente la información, que puede provenir de cualquier medio, de modo que se puede leer el periódico, ver la televisión, escuchar la radio, y hacer llamadas desde un solo medio. Forma que permite a las personas generar puntos de vistas, información y conocimiento, a través de diferentes herramientas como blogs, publicaciones en páginas web, etc.

 “Adolescentes, buceadores, jubilados, mujeres atletas, coleccionistas de cámaras antiguas, fanáticos del tenis, esquiadores y patinadores... todos tienen su propia Prensa. Se están multiplicando revistas regionales como New York, New West, D en Dallas, oPittsburgher. Algunas recortan más aún el mercado, combinando la región y el interés especial; tal es el caso, por ejemplo, del Kentucky Business Ledger o de Western Farmer.

Con la existencia de prensas nuevas, rápidas y baratas, toda organización, grupo comunitario, culto político o religioso puede actualmente permitirse el lujo de imprimir su propia publicación. Incluso grupos más pequeños dan a luz publicaciones periódicas sirviéndose de las multicopistas, omnipresentes en las oficinas americanas. La revista de masas ha perdido su influencia, en otro tiempo poderoso, sobre la vida nacional. La revista desmasificada —la mini revista— está ocupando  rápidamente su puesto” (Toffler, 1980).

El paisaje sonoro fue siendo desmasificado, juntamente con el paisaje impreso. Hubo una división de la masa de oyentes en las emisoras, puesto que surgieron muchos más programas que elegir. Además, el medio de comunicación de masa más poderoso o efectivo, la televisión, empezó a desmasificarse, Los video-games estaban haciendo que las personas cambiaran, pasando de ser meros receptores pasivos, a ser también transmisores de mensajes. En tanto que se encontraban manipulando el aparato, en vez de dejar que el aparato les manipulara a ellos.

Lo que parece ser un conjunto de acontecimientos carentes de relación entre sí, resulta ser una ola de cambios estrechamente interrelacionados que barren el horizonte de los medios de comunicación, desde los periódicos y la radio, hasta las revistas y la televisión. Así, los medios de comunicación de masas se ven atacados.

Anteriormente la mayor posibilidad de acceso a información y conocimiento, era poder acceder a bibliotecas, podemos ver que ya han cambiado esas formas de acceder al conocimiento, en tanto que se hace uso de la tecnología que nos brinda cantidad de herramientas informáticas, con demasiada información como lo son las bases de datos. “Nuevos y desmasificados medios de comunicación están proliferando, desafiando —y, a veces, incluso remplazando— a los medios de comunicación de masas que ocuparon una posición tan dominante en todas las sociedades de la segunda ola.

La tercera ola inicia así una Era verdaderamente nueva, la Era de los medios de comunicación

Desmasificados. Una nueva Infósfera está emergiendo a lo largo de la nueva tecnosfera. Y esto ejercerá un impacto más transcendental sobre la esfera más importante de todas, la que se alberga en el interior de nuestros cráneos. Pues, tomados en su conjunto, estos cambios revolucionan nuestra imagen del mundo y nuestra capacidad para entenderlo.

Insaciables lectores de libros de bolsillo y revistas de interés especial, engullen a pequeñas cantidades volúmenes enormes de información. Pero mantienen también su atención en esos nuevos conceptos o metáforas que resumen u organizan los destellos en conjuntos más amplios. En lugar de intentar embutir los nuevos datos modulares en las habituales categorías o marcos de la segunda ola, aprenden a confeccionar los suyos propios, a formar sus propias “ristras” con el material fragmentado que les lanzan los nuevos medios de comunicación.

Además de todo esto, la desmasificación de la civilización, que los medios de comunicación reflejan e intensifican, trae consigo un enorme incremento en la cantidad de información que todos intercambiamos unos con otros. Y este aumento es lo que explica por qué nos estamos convirtiendo en una “sociedad de información”.  Pues cuanto más diversa es la civilización —cuanto más diferenciadas son sus tecnologías, sus formas de energía, sus personas—, más información debe circular entre sus partes constitutivas si ha de mantenerse unido el todo, especialmente bajo la tensión de un cambio extremo”. (Toffler, 1980)

Las personas y organizaciones desean continuamente mayor información, es por esto que el sistema empieza a transmitir intensamente, gran cantidad de datos. Entre otros aspectos podemos decir que, es gracias a la desmasificación, que ya no se necesita salir de la comodidad de la casa para poder conocer nuevas personas, el surgimiento de las redes sociales, aplicaciones y diferentes programas de chat, ha permitido una interacción y comunicación a distancia, lo que ha sido tomado por la sociedad como un aspecto positivo, en tanto que se vive un uso masivo de redes sociales.

Finalmente llegamos a la conclusión de que la sociedad de tercera ola, es una cultura destellar. A diferencia de la segunda ola, donde nos masificaron a todos los niveles, incluyendo comprensiblemente la información, la sociedad de tercera ola nos ha desmasificado. Cada uno de nosotros de acuerdo a nuestros intereses y preferencias, podemos elegir sobre qué queremos información. Evidenciamos en algunos aspectos, una manifestación suprema de desmasificación en la información, y se ha generado situaciones como una  gran transformación en la humanidad, la cual tiene que ver con lo que estamos viviendo en la actualidad, cuando se desmasifica toda la información.

Referencias

Toffler, A. (1980). La tercera Ola. Estados Unidos: Bantam Books.

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